La Unión Sindical Obrera considera que el crecimiento de los precios al finalizar los 5 primeros meses del año hasta llegar al 1,8%, frente a la previsión del gobierno del 1% para todo el año, pone de manifiesto la gravedad de la situación económica que atraviesa el país.
Esta subida de precios va afectar especialmente a todos aquellos que verán recortadas sus nóminas como consecuencia del reciente decretazo, recortes que se están llevando a cabo no sólo en los empleados públicos, sino en los trabajadores de las empresas públicas y en personal docente de los centros concertados.
Con menos ingresos, con un IPC al alza, con la anunciada subida de la luz, el encarecimiento de los productos por la próxima subida del IVA, la duda que se plantea es cómo llegar a fin de mes. La actual situación lo que supone es un empobrecimiento de la renta disponible de los hogares.
La USO ve con preocupación cómo esta situación va a incidir negativamente en nuestro ya maltrecho mercado laboral, ya que se va a contraer el consumo y ello será un lastre para nuestra recuperación económica. Si el consumo baja en el período estival, se pondrá en riesgo el empleo estacional asociado a él.
Ante esta situación lo único que nos llega del Gobierno es el saneamiento de nuestro sistema financiero y un nuevo decretazo que, en lugar de reformar nuestro mercado laboral, sólo supondrá despidos más fáciles y más baratos.
¿Para cuándo un plan de rescate de los trabajadores, especialmente de aquellos que han perdido su empleo?
Esta subida de precios va afectar especialmente a todos aquellos que verán recortadas sus nóminas como consecuencia del reciente decretazo, recortes que se están llevando a cabo no sólo en los empleados públicos, sino en los trabajadores de las empresas públicas y en personal docente de los centros concertados.
Con menos ingresos, con un IPC al alza, con la anunciada subida de la luz, el encarecimiento de los productos por la próxima subida del IVA, la duda que se plantea es cómo llegar a fin de mes. La actual situación lo que supone es un empobrecimiento de la renta disponible de los hogares.
La USO ve con preocupación cómo esta situación va a incidir negativamente en nuestro ya maltrecho mercado laboral, ya que se va a contraer el consumo y ello será un lastre para nuestra recuperación económica. Si el consumo baja en el período estival, se pondrá en riesgo el empleo estacional asociado a él.
Ante esta situación lo único que nos llega del Gobierno es el saneamiento de nuestro sistema financiero y un nuevo decretazo que, en lugar de reformar nuestro mercado laboral, sólo supondrá despidos más fáciles y más baratos.
¿Para cuándo un plan de rescate de los trabajadores, especialmente de aquellos que han perdido su empleo?
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